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19 DE OUTUBRO DE 2013

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El Convenio tiene como objetivo asegurar que las víctimas tengan acceso a medidas especiales de

protección durante la investigación y proceso judicial.

Por último pero no menos importante, para la implementación de la Convención se requiere un conjunto de

políticas integrales, en la que participen todos los actores relevantes, incluyendo todas las agencias estatales

pertinentes y servicios, así como organizaciones de la sociedad civil, para que la violencia contra las mujeres y

la violencia doméstica se aborden de forma coordinada.

Hasta la fecha, 32 países han firmado el Convenio, de los cuales 5: Turquía, Albania, Portugal, Montenegro

y Italia han terminado el proceso de ratificación. Los parlamentos de Austria y Bosnia & Herzegovina lo han

hecho también. Y Francia, Andorra, Serbia y España lo harán muy pronto.

Para qué el Convenio entre en vigor, son necesarias 10 ratificaciones. Estamos muy cerca.

La Red Parlamentaria " Mujeres libres de violencia”

En su acción de lucha contra la violencia de género, la Asamblea Parlamentaria ha establecido una

novedosa estructura que es el Network o Red Parlamentaria " Mujeres libres de violencia”.

Se trata de una red de diputados nacionales de los países miembros del Consejo de Europa, que crean un

vínculo permanente entre ellos y la Asamblea, con el fin de mejorar la eficacia de su acción en el campo de la

lucha contra la violencia de género.

En los últimos años, se han incorporado también parlamentarios de Estados no europeos que mantienen

estrechos lazos de cooperación con la Asamblea: como son el Parlamento marroquí, el Consejo Legislativo

Palestino, o estados observadores como Canadá.

La Red parlamentaria es la expresión de la fuerte voluntad política presente en gran parte de los

parlamentos europeos.

Sin voluntad política, hasta las mejores causas fácilmente se pierden.

Para combatir la violencia contra las mujeres de una manera eficiente, es necesario el compromiso de

personas con gran responsabilidad en todos los poderes del Estado: en el gobierno, en el Parlamento, en el

poder judicial. Y por supuesto, el apoyo de la sociedad civil.

Esta Red parlamentaria fue creada en 2006 para formar parte de la campaña europea de sensibilización.

Sin embargo, dos años más tarde, con más de 200 actividades en 40 sedes parlamentarias nacionales

distintas, y con el crucial apoyo de 56 miembros parlamentarios, la Asamblea decidió que la Red debía

continuar con sus actividades.

Actualmente, la principal prioridad de nuestra red es la promoción de la Convención de Estambul. En

concreto, hemos querido ofrecer a nuestros miembros un marco lo más completo posible sobre el que puedan

basarse para erradicar la violencia de género.

La red se reúne cinco veces al año: durante las cuatro sesiones plenarias de la Asamblea Parlamentaria en

Estrasburgo, y una vez al año en un país fuera de Francia.

Cada vez elegimos como tema un aspecto diferente de la violencia de género: hablamos, por ejemplo, de

violación conyugal, de violencia psicológica, de acecho.

Más recientemente, tratamos la prostitución y la trata de seres humanos, y hace unas semanas tuvimos

una audiencia sobre la rehabilitación de los autores de violencia conyugal.

Estas reuniones ofrecen la oportunidad de hablar con personas implicadas personalmente en el ámbito de

la lucha contra la violencia, ya sean activistas, trabajadores sociales, educadores o incluso, a veces víctimas.

En mi papel de Coordinador político de la Red parlamentaria y como “General rapporteur” - Relator General

- sobre la violencia contra las mujeres, me dedico a muchas otras actividades no solo durante sino también

fuera de las reuniones de la red.

He contactado con más de 300 interlocutores en toda Europa, con el fin de presentar las actividades de la

Asamblea y crear así sinergias.

Desde entonces he participado en numerosos eventos, encuentros y misiones, a nivel nacional e

internacional.

Considero este trabajo de representación como un ejemplo de diplomacia parlamentaria destinada a crear

conciencia sobre la violencia contra las mujeres y promover la entrada en vigor del Convenio de Estambul.